La Costa Dorada –o como se le conoce en catalán, la Costa Daurada– es uno de los rincones más bonitos del litoral de Cataluña. Son 80 kilómetros junto al mar Mediterráneo que ofrece unos paisajes azules, un sol radiante y una arena de color dorado que le da nombre a su marca comercial. Pero no todo es playa: también hay enclaves verdes con un interesante patrimonio cultural que no te puedes perder.
Te hemos preparado una guía con todos los imprescindibles de la Costa Dorada, pueblecitos con encanto, parajes inolvidables, monumentos sorprendentes, la gastronomía que debes probar, rutas de senderismo y mucho más.
Salta directamente a:
- 1 El pueblo de Miravet y su castillo
- 2 Un paseo por el Delta del Ebro
- 3 Una vuelta por el patrimonio de Tarragona
- 4 Cala Waikiki o Cala Fonda
- 5 Un divertido día en PortAventura
- 6 Un jardín botánico de 14 hectáreas: Parc de Samà
- 7 Comer arroz en La Ràpita
- 8 El Real Monasterio de Santa Maria de Poblet
- 9 El acueducto de Les Ferreres
- 10 El Castillo de Tamarit
El pueblo de Miravet y su castillo
Una visita obligatoria en la Costa Dorada es el coqueto pueblo de Miravet, que deja estampas inolvidables por el paso el río Ebro. En la parte alta del casco antiguo preside el municipio un bonito castillo de la época árabe, construido en el siglo IX. Es uno de los últimos vestigios musulmanes de Cataluña, que fue ocupado en el siglo XII por Ramon Berenguer IV para entregarlo a la orden de los Templarios.
El castillo de Miravet ha sido testigo de momentos históricos relevantes como la Guerra dels Segadors (1640), la de Sucesión (1701-1715) y las guerras carlistas del siglo XIX. La entrada vale 5 euros los adultos y 3 euros la reducida (pensionistas, jóvenes, etc.); los menores de 16 años entran gratis.
Un paseo por el Delta del Ebro
El Delta del Ebro es un destino en la Costa Dorada lleno de experiencias y encantos. Sus espacios clave son la Desembocadura, donde te puedes asomar por el Mirador del Zigurat, hacer un crucero por el río Ebro o ver la curiosa playa del Garxal, muy poco profunda y con un gran dinamismo; la playa El Trabucador, un brazo de arena que se adentra en el mar y que es un símbolo del Parque Natural.
La Punta del Fangar, en el extremo norte, es uno de los lugares más singulares del Delta del Ebro y es de los más visitados por los senderistas, ya que es la única vía para acceder a la península a pie. La Laguna de la Encanyissada es el lugar ideal para los amantes del avistamiento de pájaros. Y un espacio emblemático que no debéis dejar de visitar es la Isla de Buda, que es el humedal mejor conservado del Mediterráneo Peninsular y donde se cultiva el preciado arroz bomba.
Una vuelta por el patrimonio de Tarragona
Si viajas a la Costa Dorada no puedes dejar de visitar la capital. Hay muchas cosas que ver en Tarragona, conocida por su impresionante patrimonio histórico relacionado, sobre todo, con la huella que dejaron los romanos. Sin duda lo más sorprendente es su anfiteatro, que data del siglo II d.C., y que está a las afueras de la antigua ciudad, junto al mar, y llegaba a albergar hasta 14.000 espectadores. Acude a una visita guiada en la que te contarán todas las curiosidades del lugar; también se hacen por la noche, con un halo todavía más mágico.
Otros lugares con encanto por los que debes pasear en este rinconcito de la Costa Dorada es el barrio típico de pescadores El Serrallo, la comercial Rambla Nova o su Mercado Central, un espacio en el que entremezclarte con los lugareños.
Cala Waikiki o Cala Fonda
No estamos hablando de ninguna playa exótica de algún país lejano, sino que está en la Costa Dorada y es de las más queridas y populares de la zona. Está a unos 6 kilómetros de la ciudad de Tarragona y puedes ir en coche o, si prefieres darte un bonito paseo, basta con seguir la playa Larga.
La Costa Dorada es muy turística y ha conllevado un gran desarrollo urbanístico; pese a ello, esta cala se mantiene al margen de las construcciones y mantiene un encanto muy salvaje, en un entorno protegido y abrazada por el bosque de la Marquesa.
Un divertido día en PortAventura
¿Por qué no os regaláis un día divertido en familia, en pareja o con los amigos en la Costa Dorada? En Salou está uno de los complejos de ocio más importantes de España: PortAventura World.
Alberga hasta tres parques temáticos: PortAventura, Ferrari Land y Caribe Aquatic Park. Hay muchas cosas que ver en Salou, pero sin duda, el mayor atractivo turístico son las atracciones de Portaventura, como la montaña rusa Dragon Khan, la impresionante Furius Baco, la famosa hypercoaster Shambhala o la familiar y emocionante montaña rusa El Diablo – Tren de la Mina.
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Un jardín botánico de 14 hectáreas: Parc de Samà
A 10 minutos del pueblo de Cambrils tenemos una cita muy interesante que hacer en la Costa Dorada: pasear sin prisas por el Parc de Samà, un jardín botánico histórico que se construyó en 1881. Hoy este acogedor espacio alberga 1.500 especies de flora y fauna, entre las que destacan plantas exóticas, árboles centenarios y gran diversidad de especies raras. El jardín está protegido como Bien de Interés Cultural y cuenta con un palacete y un lago con puentes colgantes.
Comer arroz en La Ràpita
¿Qué sería de un viaje a la Costa Dorada sin probar su exquisita gastronomía mediterránea? Un buen destino para los que buscan comer bien es La Ràpita, entre el mar y las montañas de la Sierra del Montsià. Con permiso de los valencianos, es donde se come uno de los mejores arroces del Mediterráneo. También son conocidos sus mejillones y, de hecho, tiene mejilloneras que se han convertido en atractivo turístico y son visitables.
El Real Monasterio de Santa Maria de Poblet
Los amantes de la arquitectura y la historia tienen una parada imprescindible que hacer en la Costa Dorada en la Conca de Barberá. Aquí está el Real Monasterio de Santa Maria de Poblet, que está declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Es un importante complejo arquitectónico que forma parte de la Ruta del Cister y fue fundado en 1.150. Tiene una magnífica iglesia y otras construcciones que reflejan el esplendor que llegó a tener en la época de la Corona de Aragón. En la actualidad cuenta con hospedería interna, hotel, tienda y un espacio museístico para conocer a fondo esta joya de la Costa Dorada.
El acueducto de Les Ferreres
Siguiendo tras los pasos de la huella romana en la Costa Dorada hay que visitar el acueducto de Les Ferreres, también conocido como Pont del Diable, que es uno de los mejor conservados de la Península Ibérica. Se construyó en el siglo I a.C. y es visitable todo el año. Está entre Tarragona y la localidad de San Salvador.
Te encontrarás con un acueducto con dos líneas de arcos de 217 metros de longitud y 27 metros de altura. El entorno es ideal para hacer una ruta de senderismo tranquila.
El Castillo de Tamarit
Entre la playa de Tamarit y Cala Jovera se erige el imponente Castillo de Tamarit. Se levantó el siglo XI, en un momento en el que estaba junto a un núcleo medieval y una pequeña aldea de la que hoy no quedan restos. Tiene una muralla que nace directamente de las rocas del mar.
En la actualidad no es visitable el interior de este famoso castillo que ver en la Costa Dorada, pero nada te impide admirar su fachada ubicada en un enclave privilegiado. Además hay que tener en cuenta que Tamartit es uno de los pueblos cerca de PortAventura que no puedes perderte.
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