Hoy os proponemos viajar a un paraíso del esquí como son los Alpes Franceses. Todo esquiador que se precie debe pasar en algún momento de la temporada por las estaciones de esquí más espectaculares de Europa, con picos que se acercan a los 5.000 metros de altitud, con el Montblanc como gran coloso. Deja de soñar y convierte en realidad tu anhelo, los Alpes están más cerca que nunca.
Esquiar en los Alpes supone nuevas emociones, cambiar de país, de costumbres, de lengua, de horarios, conocer a esquiadores de toda Europa -y de más allá-, experiencias únicas, paisajes inolvidables… ¿y dónde mejor que hacerlo en el dominio esquiable más grande del mundo? Hablamos, por supuesto, de “Les 3 Vallées”: una espectacular área que agrupa nada menos que 8 estaciones de esquí en los Alpes y suma 600 kilómetros.
Entre ellas, una de las más imponentes por sus kilómetros de pistas, extensión, innovación y popularidad es Val Thorens, en el valle de Tarentaise, en la Saboya francesa. La altitud de las montañas de los Alpes no solo significa que tendrás unas fotos espectaculares para llenar el Instagram, sino que son garantía de gran cantidad y calidad de la nieve. ¿Te animas a descubrir Val Thorens?
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El mapa de pistas de Val Thorens-Orelle
¿Qué nos encontraremos en la estación de esquí de Val Thorens, en los Alpes Franceses? Se trata de un complejo invernal que abrió sus puertas hace más de 40 años, en un paraje increíble. Alrededor del pueblo se fue montando, con los años, la infraestructura hotelera y el que por aquel entonces era el teleférico más grande del mundo: el que lleva hasta la cima Caron y que es capaz de transportar hasta 150 personas al mismo tiempo.
No te pierdas las vistas del viaje, y para ayudarte a descifrar las espectaculares cimas que te rodean, hay un mapa que te guía (puedes ver el cercano MontBlanc y divisar hasta el Cervino, en días claros).
Ubicada en “Les Trois Vallées”, la estación de Val Thorens tiene una cota mínima a 1.850 metros de altitud, y la máxima alcanza nada menos que los 3.200 metros. No obstante, prácticamente todas las pistas se encuentran a más de 2.000 metros, por lo que la nieve está garantizada durante toda la temporada de esquí (es la estación a más altitud de Europa). Eso sí, también es sinónimo de que te tienes que abrigar bien (por capas) para esquiar en Val Thorens.
Vamos a su ficha técnica, pura y dura: Val Thorens tiene 150 kilómetros esquiables que se reparten en 86 pistas con niveles de dificultad para todos, desde los debutantes que no han esquiado en su vida (aunque recomendamos haberlo hecho alguna vez, para exprimir más y mejor esta estación en los Alpes) hasta los veteranos que buscan retos emocionantes.
Concretamente, la estación de esquí de Val Thorens tiene 13 pistas verdes, 34 pistas azules, 30 pistas rojas y 9 pistas negras. Te puedes mover cómodamente por todas ellas gracias a los 30 remontes que tienen las pistas, prácticamente todos de última generación: hay un telesquí, cuatro cintas transportadoras, tres telesillas, 13 telesillas desembragables, tres telecabinas, un telecabina desembragable, un teleférico (ya mencionado), tres funiculares y un funitel.
Los sectores para esquiar en Val Thorens
¿Cómo se distribuye la estación de esquí de Val Thorens? Básicamente, en dos sectores: el primero, Val Thorens, que es donde se encuentra todo el ajetreo y la infraestructura hotelera y de tiendas; el segundo, más tranquilo, es Orelle, ideal para los que quieren huir de las masificaciones y esquiar a tu ritmo. A continuación, vamos a dar unas pinceladas a las pistas que no deberías perderte si vas a esquiar a la estación de esquí de Val Thorens, en los Alpes Franceses.
Esquiar en Val Thorens
Para los que están empezando o viajan con la familia, deben pasarse por la zona de Péclet: aquí encontraréis trazados sencillos, pero divertidos, mientras disfrutáis del espectacular entorno de los Alpes y cerca de los alojamientos a pie de pistas en Val Thorens, como es el caso de la pista azul Corniche o las pistas verdes Flocon y Combe de thorens. Para mejorar la práctica sobre los esquís en las curvas, no debéis perderos la pista Genepi.
Los esquiadores más avanzados también tienen en este sector una zona muy emocionante: acudid a las laderas del pico Caron en busca de la adrenalina que ofrece la pista roja Col d’Audzin, que os dejarán sin hipo gracias a su impresionante panorámica de los Alpes, y que conecta con la pista negra Cristaux; también es un buen lugar para descubrir las divertidas pistas rojas de Falaise, Asters y Maurienase.
Esquiar en Orelle
Se trata de una zona agradable por su mayor tranquilidad, como decíamos antes, lo que implica que es un sector seguramente más agradecido para los que se están iniciando en los esquís y prefieren no sentirse agobiados por el ajetreo constante de esquiadores a su lado.
Para dar los primeros pasos, este sector tiene una pista muy apropiada: la azul Peyron, que además brinda un recorrido espectacular: baja desde el glaciar de la Pointe Renod en una pendiente amplísima con vistas al valle de Maurienne, con algunas curvas, pero sin dejar de ser sencilla, y al ser larga, os permitirá ir afianzando la confianza sobre los esquís; otra propuesta interesante es la pista azul Lory, igualmente larga y con poca pendiente, y en la que está considerada como una de las zonas más bonitas de la estación de esquí de Val Thorens.
Los esquiadores más expertos deben probar en algún momento la pista negra Combe Rosael, que es la que desciende desde la cota más alta de la estación: el pico Caron, a 3.200 metros, y que llega hasta el Plan Bouchet, a 2.350 metros, ¡casi mil metros de desnivel con muchas emociones por el camino! En su trayecto, va enlazando con pistas rojas y azules (como Mauriennaise o Gentianes).
‘Après-ski’ en Val Thorens: ¿Qué más podemos hacer en los Alpes?
Y por supuesto, como en todos los viaje de esquí, en los Alpes Franceses no faltan propuestas para cuando cierran las pistas de Val Thorens. Si sois de los que queréis pasar el resto del día tomando algo y disfrutando de la vida, recordando las anécdotas en pistas, no os perdáis el ‘après-ski’ que comienza ya a las 14.30 horas en La Folie Douce – La Fruitière, seguramente el espacio de ocio y música más popular de toda la estación; Les Enfants Terribles es parada obligatoria para los que quieren alargar la fiesta.
Más allá del copeo y la juerga, en Val Thorens y alrededores también tendremos otras propuestas para redondear la escapada de esquí. Por ejemplo, probar La Tyrolienne, un vuelo de nada menos que 1,3 kilómetros y que dura un minuto y 45 segundos a 100 kilómetros por hora; u optar por explorar los Alpes Franceses a bordo de una moto de nieve y por la noche, una experiencia mágica para los apasionados de la montaña más salvaje.
También es posible conducir por el circuito de hielo de Val Thorens (el más alto de Europa); o los que quieren vivir algo único e inolvidable, la mejor propuesta es bucear bajo hielo: te sumergirás 20 minutos y descubrirás todo un mundo nuevo acuático lleno de luces y sombras y que no requiere experiencia previa en buceo. El esquí y estas propuestas harán que tu viaje a los Alpes Franceses sean, sencillamente, inolvidables.