Los días cada vez son más largos, sale más el sol y las temperaturas empiezan a subir. Se acerca el fin del invierno. A muchos les alegra, pero a otros, como los amantes del esquí, no nos deja de dar algo de pena porque vemos que la temporada se acerca a su fin. Pero no nos anticipemos: ¡todavía quedan unas cuantas semanas para seguir esquiando en las pistas! Y lo mejor de todo: llega marzo, uno de los mejores meses para esquiar por muchos motivos.
¿Siempre has pensado que enero y febrero era lo ideal para un viaje a la nieve y nunca has esquiado en marzo? Sigue leyendo para ver todo lo que te estás perdiendo… No te encantes, porque aún estás a tiempo de buscar ofertas para esquiar en marzo.
Salta directamente a:
¿Por qué mola esquiar en marzo? Todas las ventajas
Los meses de invierno, cuando se producen grandes nevadas por diferentes puntos de la geografía española y la nieve inunda los telediarios, es el momento en el que a muchos se les enciende la bombilla y recuerdan que es una buena época para coger los esquís y hacer una escapada a la nieve. Los esquiadores más apasionados, claro está, ya lo llevamos haciendo desde unas semanas antes. Ahora bien, te vamos a contar un secreto: ¿Sabías que marzo es uno de los mejores meses para ir a esquiar? Estos son nuestros motivos:
- Las temperaturas son más agradables. Los fanáticos del esquí vamos a la nieve sea como sea, pero a los debutantes y a las familias que van con niños pequeños, quizás les parezca mucho más atractivo ir a las pistas sin sentir que se están congelando de pies a cabeza. En marzo, ya se nota que van subiendo las temperaturas y eso a todos nos gusta. Además, ¿existe alguna sensación más agradable que hacer una pausa para descansar entre bajada y bajada en una terracita tomando algo al sol primaveral?
- Los días son más largos. A finales de diciembre los días comienzan a alargar y hacia marzo ya se nota especialmente. Además, el último fin de semana de este mes es cuando se cambia la hora y la vida adopta otro ritmo. Si hacemos un viaje a la nieve en marzo, tendremos más horas de luz y eso significa que se abre el abanico de posibilidades para el mejor après-ski: podemos hacer alguna actividad en el entorno nevado todavía con sol, hacer turismo con luz solar, etc.
- Hay más nieve. Hace más calor y hay más horas de sol, y aún así… ¿Hay más nieve? Sí, has leído bien. Aunque el marketing navideño ha hecho mucho daño a nuestra percepción de los paisajes nevados -ay, ¡todas esas películas, dibujos animados y postales con montañas a rebosar de nieve!-, lo cierto es que cuando hay más acumulación de nieve es las montañas de la Península es en marzo. Sigue leyendo, porque después entraremos en más detalle respecto a la cantidad y los tipos de nieve que hay en las diferentes zonas de esquí de España…
- Hay menos colas. Las estaciones de esquí se llenan, sobre todo, en las fechas navideñas y fin de año, así como en enero y febrero, en pleno invierno, que es cuando colegios, por ejemplo, cogen sus «semanas blancas de esquí escolar«. Son los meses en los que recordamos que se puede hacer esa cosa llamada esquí. Cuando comienzan a subir las temperaturas, muchos se olvidan y empiezan a pensar en el mojito y en el chiringuito de la playa. ¡Ellos se lo pierden! Y nosotros ganamos en diversión porque las estaciones de esquí están menos masificadas y, por tanto, perdemos menos tiempo haciendo cola en los remontes y en los accesos a las pistas.
- Es más barato. La temporada alta en las estaciones de esquí es, por lo general, los puentes y festivos -como Navidad, Fin de Año y Semana Santa- y los meses de enero y febrero. Fuera de estas fechas, entramos en temporada baja, por lo que los precios de los paquetes de hotel+forfait para esquiar en marzo son considerablemente más económicos. Además, si reservas con Estiber, muchos paquetes incluyen el sello de Garantía de Nieve, que quiere decir que puedes reservar con total tranquilidad y con bastante antelación (así te sale aún más barato) tu viaje a esquiar en marzo y podrás modificarla o cancelarla sin coste si la estación de esquí decide adelantar el cierre de la temporada por falta de nieve o por cualquier otro motivo. Así puedes contratar ya tu pack sin asumir riesgos.
Como ves, esquiar en marzo quiere decir pagar menos, hacer menos colas, tener más cantidad de nieve, temperaturas más altas y más horas de sol. Con todos estos alicientes, ¿se te ocurre una época del año mejor para esquiar?
¿Dónde hay más nieve en España en marzo?
Como hemos visto, hay mucha más nieve para marzo que en otros meses más fríos como enero y febrero. No nos lo inventamos, así lo determina el estudio «Caracterización de la nieve en España y su incidencia en las inundaciones» elaborado por el Ministerio para la Transición Ecológica del Gobierno español. En él se estudia la evolución de la nieve en diferentes sistemas montañosos de la Península: Pirineos, Sierra Nevada, Sistema Central y Cordillera Cantábrica.
Así, vemos que el pico de cantidad de nieve acumulada, de media, en el Pirineo, se encuentra entre finales de febrero y finales de marzo, habiendo todavía buenas cantidades en abril; así que estaciones como Formigal-Panticosa, Cerler, La Molina, Masella, Boí Taüll o Baqueira-Beret son buenos destinos para esquiar en marzo.
En el caso de Sierra Nevada, junto a Granada, en el estudio del Ministerio se aprecia claramente que el momento de mayor nieve acumulada es entre marzo y abril; en mayo las cantidades bajan, pero solo hasta el punto en el que estaban a mediados de enero. En el Sistema Central, si quieres esquiar cerca de Madrid,el comportamiento es similar: la mayor cantidad de nieve es entre febrero y abril. Lo mismo ocurre en el caso de la Cordillera Cantábrica: los niveles se mantienen bastante altos entre febrero y abril, y hay un claro pico de acumulación de nieve al entrar en el mes de marzo.
Recuerda que en esta época del año es más fácil que nos encontremos con la llamada «nieve primavera». Se produce cuando el sol calienta más y, al subir las temperaturas de los 0ºC, comienza el deshielo de la nieve. Eso provoca que se transforme en una masa blanda que hace que esquiar sea algo diferente; a algunos les encanta, mientras que a otros les da algo de respeto.
A primera hora del día, lo normal es que las pistas estén como de costumbre, tras el frío de la madrugada y después de que hayan pasado las máquinas; cuando el hielo de la mañana se empiece a derretir, tendremos nieve más suelta, ideal para todo tipo de esquiador. Después de comer, la cosa cambia: es cuando empezaremos a ver pequeños charcos de agua, con lo que la nieve estará más apelmazada y húmeda, que nos obligará a adoptar posturas diferentes sobre los esquís, porque nos frenará más.
Las mejores estaciones para esquiar en marzo
¿Te has convencido y quieres probar a hacer una escapada en marzo? Seguro que repetirás y te convertirás en un habitual de este momento de la temporada de esquí. ¿Dónde es más recomendable esquiar en marzo? Aquí van nuestras sugerencias:
- Esquiar en Andorra. Así, en general. Son buenas opciones tanto la inmensa oferta para esquiar en Grandvalira como las otras de tamaño más moderado, Pal-Arinsal y Ordino-Arcalís. La mayoría de nuestros packs de hotel+forfait para esquiar en Andorra en marzo incluyen el sello de Garantía de Nieve, lo cual es ya un gran aliciente, y además, estas estaciones de esquí tienen una extensa red de cañones de producción de nieve artificial por si fallara la climatología. Es un gran momento para visitar Andorra porque acoge eventos de lo más interesantes, como las Finales de la Copa del Mundo de esquí alpino, que se celebrarán en Grandvalira – Soldeu – El Tarter del 13 al 19 de marzo de 2023, o el completo Snowrow Festival, del 30 de marzo al 2 de abril de 2023, que combina esquí, música y espectáculos.
- Formigal-Panticosa. Marzo es un buen mes para ir a esquiar a Formigal y Panticosa, en el Pirineo Aragonés, porque podemos encontrar interesantes precios en packs de hotel más forfait. Suma 147 pistas en 182 kilómetros esquiables que, ahora, con un tiempo más idóneo, es más asequible. Podemos añadir una visita al famoso balneario para completar la escapada.
- Baqueira-Beret. Es una estación del Pirineo Catalán conocida por acoger a esquiadores de un cierto «caché», ya que por sus pistas bajan bastantes personajes famosos. Es cierto que Baqueira es bastante cara, así que aprovecha marzo para conocer sus pistas a precios bastante más económicos. Este mes es más barato en todas las estaciones de esquí, pero en esta se nota más el ahorro porque en temporada alta, especialmente los alojamientos, tienen precios más elevados. Una buena oportunidad para probar sus 113 pistas de todos los niveles de dificultad, que se distribuyen por 165 kilómetros esquiables.
- Esquiar en Cerler. Esta estación de esquí del Pirineo Aragonés está considerada de las más económicas, y en marzo, lo es todavía más. Ahorra dinero y, además, hazlo en un momento de la temporada en el que hay más acumulación de nieve en sus pistas, hace mejor tiempo y hay menos masificaciones y tiempo de espera. Tiene un dominio esquiable de 80 kilómetros -la mitad de ellos están innivados-, en los que hay hasta 72 pistas con trazados para todos los niveles. En el valle de Benasque, nos ofrece muchas posibilidades de seguir haciendo deporte en la nieve durante el après-ski, y también hacer turismo por los bonitos pueblos de la zona, como el conocido pueblo de Benasque, todo un punto de encuentro para los amantes de la montaña.
- La estación de esquí de Boí Taüll. Otra estación de esquí del Pirineo Catalán donde vale la pena esquiar en marzo porque podremos conseguir los precios más económicos para una escapada a la nieve. Es una estación que es una auténtica joya, enclavada en un paisaje precioso, a cotas entre 2.020 y 2.751 metros. Tiene 43 pistas que suman 46 kilómetros esquiables.
- Estaciones de esquí en Alpes franceses. Por último, no podemos dejar de recomendar un viaje a los Alpes, el sueño de todo esquiador. El mes de marzo es un buen momento para esquiar porque podremos encontrar interesantes ofertas y, además, tenemos la garantía de que habrá muchos centímetros de nieve en estaciones de esquí cuyas cotas sobrepasan los 2.000 metros de altitud. Las más recomendables para esta época son Val Thorens, Tignes-Val d’Isere o Les Deux Alpes, que son las más elevadas, y además tienen glaciares sobre los que podemos esquiar, incluso, durante el verano.