El Vallnord Bike Park La Massana, en Andorra, acogió por quinta vez un acontecimiento de importante magnitud como es la Copa del Mundo UCI de BTT.
La UCI confió en la Massana en 2008 por primer vez y gracias al éxito en cuanto a organización y asistencia de público, volvió a confiar en ella en 2013, otorgándole también el privilegio de organizar las ediciones de 2017 y 2018.
Desde Estiber, como no podía ser de otra manera, acudimos el fin de semana del 3 y 4 de septiembre a las finales masculinas y femeninas de las pruebas down-hill y cross-country.
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Gran organización y respuesta del público
Cabe destacar que tanto la organización como la asistencia de público estuvieron a la altura de un evento de tal magnitud. El público quedó asombrado de la espectacularidad del evento, organizado de tal manera que todos pudiesen disfrutar hasta del más mínimo detalle. El montaje de los stands de los distintos equipos permitían al público presenciar aspectos como la preparación de las bicicletas para la carrera, el calentamiento de los riders, los alimentos que consumían pre y post carrera, etc.
Toda la organización estaba orientada al disfrute de los espectadores, combinada con la seguridad a la altura de un evento tan importante.
El espectáculo estaba garantizado. El transcurso y resultados de las distintas pruebas no dejó indiferente a nadie. La jornada del sábado estuvo marcada por la prueba down-hill masculina y femenina.
Down-Hill, la modalidad que gana más adeptos
En categoría femenina, Rachel Atherton, la máxima favorita, se volvió a proclamar una vez más campeona del mundo. El dominio de la corredora británica fue apabullante, sacando seis segundos a la segunda clasificada, Tracey Hannah. La tercera posición fue para la corredora francesa del Team Commençal Vallnord, Myriam Nicole, quien había obtenido el mejor tiempo en las clasificatorias.
En categoría masculina, la prueba transcurrió con una emoción descomunal. Durante siete descensos consecutivos, distintos riders fueron intercambiándose el liderato. Finalmente, fue el norte-americano Aaron Gwin quién se hizo con el título mundial, debido a la amplia ventaja con la cual llegaba a la última etapa celebrada en el Vallnord Bike Park la Massana.
El corredor americano no arriesgó en absoluto y permitió a Danny Hart proclamarse vencedor de la etapa realizada en la estación de Andorra, seguido por el sud africano Greg Minaar y Loic Bruni, campeón del mundo hasta la fecha.
Sin embargo, el estallido del público llego con el descenso del legendario Steve Peat, ganador de cinco medallas en el Campeonato Mundial de Ciclismo de Montaña entre los años 2000 y 2009 y cuatro medallas en el Campeonato Europeo de Ciclismo de Montaña entre 2000 y 2005. «Peaty» realizó su último descenso y el homenaje que recibió por parte del público y de la organización fue digno de una auténtica leyenda del ciclismo de montaña.
El Cross-Country, el clásico de la prueba
Si la jornada del sábado estuvo llena de espectáculos y emociones, la del domingo no fue para menos. En esta ocasión, asistimos a las pruebas masculinas y femeninas del cross-country.
En la modalidad femenina, la sorpresa fue mayúscula. La suiza y medalla de bronce en los Juegos Olímpicos Catherine Pendrel, arrebató el título mundial a Annika Langvad, quién llegaba a esta última etapa como líder en la clasificación general. El podium lo completó la canadiense Emily Batty.
En la modalidad masculina no hubo sorpresas y el francés Julien Absalon se hizo con el título mundial, después de una discreta participación en los Juegos Olímpicos. En segunda posición acabó Nino Schurter, quién en esta última etapa no tuvo demasiada suerte y acabó en decimotercera posición tras sufrir un pinchazo en una de sus ruedas. En tercera posición y completando el podium apareció el francés Maxime Marote.
En esta ocasión, la nota emocionante la puso el español José Antonio Hermida, que a sus 38 años pone fin a la alta competición. El de Puigcerdá tuvo un apoyo masivo en las gradas y recibió una calurosa ovación por parte de todos los asistentes.
No queremos cerrar este post sin solicitar desde Estiber un reconocimiento más notorio a este tipo de eventos, apoyado y seguido por miles de seguidores y capaces de llenar de emoción e ilusión a millones de personas.
Imagen principal: Principado de Andorra