Si cuando viajas, eres de los que buscan restaurantes autóctonos y auténticos, los de toda la vida a los que van los locales, los que preparan platos tradicionales con ingredientes de proximidad y de calidad, en tu viaje debes marcar como visita obligatoria una de las bordas en Andorra. Las más antiguas nacieron hacia el siglo XVI y originalmente eran casas de campo separadas de la masía principal en las que se guardaban los aperos y los animales e incluso se utilizaban como secadores sus pisos superiores.
Con el tiempo, la pérdida de la rentabilidad agraria y el éxodo rural, las bordas de Andorra fueron transformándose en restaurantes de lo más típicos en los que se sirve comida tradicional. Tienen mucho encanto, ya que conservan elementos que recuerdan su antiguo uso agrario como abrevaderos de los animales, que hoy se funden con la decoración rústica del establecimiento. ¿Te animas a adentrarte en los restaurantes más genuinos de Andorra? No te pierdas esta lista con las mejores bordas si vas a reservar un viaje a Andorra. Casi todas ofrecen servicio tanto para comidas como para cenas.
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Borda Raubert
Nos adentramos en una borda de Andorra a las afueras de la Massana que cambió su uso tradicional por el de restaurante en 1972. Es un local con mucha magia en el que podremos resguardarnos del frío y de la nieve en invierno gracias a su hoguera de fuego, mientras contemplas el paisaje natural que te rodea por la ventana; en verano la arquitectura de la construcción crea un microclima fresco en el interior, por lo que también es un buen refugio frente a las altas temperaturas. Lo lleva la familia Troguet Ribes, que prepara recetas tradicionales como trinxat, escudella, ensalada de mollejas, espalda de cordero con setas, carnes de caza o bacalao a la andorrana. Se puede reservar para celebraciones especiales. Hay tanto comidas como cenas.
Borda Molí dels Fanals
Una antigua borda de finales del siglo XIX que fue totalmente reformada para dar servicio de restaurante. Está en Sispony (La Massana), a solo cuatro kilómetros de la capital, donde hay diversos planes qué ver y hacer en Andorra. Entre sus platos destacamos las croquetas caseras, los caracoles a la llauna, las carnes a la brasa, las albóndigas con sepia o el pato en salsa de frutos rojos. Para comer y cenar.
Borda de l’Arena
Un restaurante muy tradicional, una borda de Andorra que se encuentra en Sant Julià de Lòria, la misma localidad donde podemos encontrar uno de los famosos tamarros de Andorra, una de las mejores actividades para hacer con niños. La Borda de l’Arena es un sitio muy acogedor con una terraza espléndida donde disfrutar de auténticos platos tradicionales de la zona, con recetas adaptadas y aptas también para vegetarianos y veganos. Tienen desde bacalao y escalivada, hasta paletilla de cordero, empanadas, ensaladas completas, caracoles y hasta calçots.
Borda de l’Avi
Encontraremos esta borda de Andorra en las afueras de la parroquia de la Massana. Se trata de un espacio muy acogedor con capacidad para hasta 200 personas, por lo que suele ser el típico restaurante que es muy utilizado para eventos y celebraciones especiales. Además, tiene salones privados y una bonita terraza exterior. Son especialistas en carnes, por lo que la carne a la brasa es uno de sus platos estrella (tiene una parrilla en la planta baja); también destacan sus pescados y amplia variedad de tapas y postres. Un buen lugar para degustar exquisitas comidas y cenas, con una decoración con aperos agrarios tradicionales y mucha madera.
Borda del Pi Andorra
Si algo caracteriza este establecimiento es que hace la función de restaurante, pero también es alojamiento, gracias a un chalet nuevo, construido en 2009, pero siguiendo los patrones de las bordas clásicas. Está en Canillo, en la carretera de Montaup (kilómetro 5,5), en medio de la naturaleza y de la cordillera pirenaica, en la población dónde podremos visitar el famoso puente tibetano de Andorra. Una borda mágica y de ensueño, donde se ofrecen experiencias especiales, como degustación de chuletones de la mano de un chef reconocido, cata de vinos ecológicos, showcooking con degustación, sesiones de yoga o charlas de nutrición deportiva. No os perdáis la borda en invierno, ¡estará rodeada de nieve!
Borda Xixerella
Al lado del pequeño pueblo de Pal, encontraremos esta tradicional borda en Andorra, hoy reconvertida en restaurante. Se caracterizan por haber sabido combinar la cocina tradicional andorrana con la mediterránea, así como darle toques de internacional. Están especializados en carnes a la brasa, así que ni os penséis qué pedir aquí. Es un restaurante bastante solicitado, así que vale la pena reservar con antelación. Una parada gastronómica clásica entre las personas que reservan un viaje de hotel más forfait en la estación de Pal-Arinsal, una de las mejores zonas donde esquiar en Andorra para principiantes.
Borda Estevet
Una bonita borda que te hará viajar en el tiempo: aún conserva sus antiguas paredes de piedra, así como las vigas de madera. Puede albergar a 250 personas y están especializados en cocina de montaña y mediterránea (no os perdáis su tradicional trinxat, hecho a base de col y patata, ni sus carnes servidas en losa de pizarra). Como añadido, tiene repostería propia y una selección de vinos muy especial. La encontraréis en la carretera de la Comella, en la capital, Andorra la Vella. Muy acogedora.
Borda Erts
Como su nombre indica, este restaurante en una tradicional borda de Andorra se encuentra en el pueblo de Erts, en la zona de Arinsal -ideal para los que vayan a hacer montaña o esquiar en este área-. Muy típica para bodas y otro tipo de celebraciones, aunque también tiene menú diario. Destaca la gran calidad de sus productos, que son de temporada y de proximidad. Su cocina es de lo más completa, con toques tradicionales de Andorra y de Francia, que dan como resultado unos platos para chuparse los dedos: carnes a la brasa, caracoles «a la llauna» y elaboraciones del chef con setas frescas de temporada.
Borda Pairal
Se encuentra en Andorra la Vella, en la calle Doctor Vilanova. Es una de las bordas más señoriales que podemos encontrar, con un aspecto muy distinguido, y también es de las más conocidas de Andorra. Entre sus platos, vale la pena probar los caracolas «a la llauna», sus carnes a la brasa, el cabrito de lechón al horno y el filete de ternera escalopado con foie de pato. Además, tienen buenos vinos y cavas y hacen deliciosos postres caseros. Un acierto seguro en la capital andorrana.
Borda de l’Hortó
Es una de las bordas más especiales de Andorra; primero, porque está en un entorno mágico, en medio de la naturaleza (en la parroquia de Canillo, cerca de la tirolina de Mon(t) Magic), y segundo, porque conserva mucho de su uso tradicional agrario, con aperos de labranza, piedra original y hasta se pueden ver los antiguos comederos y bebederos de los animales, que ahora forman parte de la decoración del restaurante. Destacan sus carnes a la brasa y los embutidos. Para quienes buscan una borda en Andorra alejada del mundanal ruido.
Borda de les Pubilles
En la carretera que va hacia Naturlandia, en pla Plaça Major d’Aixirivall, en el pueblo de Sant Julià de Lòria, encontramos esta borda reconvertida en restaurante que gusta mucho por su fantástica relación calidad-precio. Tienen carta y también menús, con un precio más ajustado, que incluye bebida y café. Especialistas en carnes a la brasa y otros platos de cocina de montaña. Además, tienen opción para celíacos. Tiene una gran terraza al aire libre, una gozada en días con temperaturas agradables, y muchas plazas de aparcamiento.