Si te estás planteando ir a la estación de esquí nórdico de Tuixent-La Vansa es porque serás un aficionado a esta modalidad que no requiere tener el talón de la bota fijado a la base del esquí. Ya lo sabes: el también llamado esquí de fondo implica un ejercicio físico mucho más suave que el alpino, el de pistas, sin impacto en las articulaciones y con un riesgo bajo de lesiones.
Si quieres esquiar en Cataluña, una referencia para practicar esquí nórdico es, justamente, la estación de Tuixent-La Vansa. Está en la cara norte del macizo del Port del Comte, es sin duda una de las estaciones con preciosas pistas de esquí en Cataluña donde pueden esquiar tanto los novatos como los esquiadores expertos. Conoce a fondo todo lo que ofrece este complejo invernal.
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¿Cómo es la estación de Tuixent La Vansa?
Desde que la estación de Tuixent-La Vansa abriera sus puertas en el año 1978, se ha caracterizado por ser un destino perfecto para los que abrazan el esquí nórdico, disciplina en la que están centrados sus trazados. En total, cuenta con 30 kilómetros de circuitos de varios niveles para practicar el esquí de fondo.
Concretamente, estas son las longitudes y grado de dificultad de cada uno de ellos: el circuito verde tiene 1,8 km; el circuito azul, 7,5 km; el circuito rojo, 13 km; y el circuito negro, 10 km. Por tanto, los que tienen una cierta dificultad son los más largos, garantizando una jornada en la nieve larga y divertida para los más expertos. Además, la estación de Tuixent-La Vansa tiene un circuito de skatting de 3,5 km que hará las delicias de los amantes de la tabla.
Senderismo en la estación de Tuixent La Vansa
Y si lo tuyo es más el senderismo, no puedes dejar de explorar los rincones de Tuixent-La Vansa con raquetas de nieve, una forma más pausada de pisarla y de avanzar sobre sus encantadores parajes invernales. Si eres un amante de este deporte, encontrarás diferentes rutas en raquetas de nieve por toda la zona. En su dominio hay señalizados varios recorridos diseñados específicamente para hacer con raquetas, una opción perfecta también para las familias.
Todo esto se puede disfrutar en un entorno de lujo lleno de bosques nevados y panorámicas del Pirineo Catalán. La estación de esquí de fondo de Tuixent-La Vansa se extiende desde la montaña del Arp, a 1.830 metros (en la vertiente de l’Alt Urgell del macizo del Port del Comte), hasta el Prat Llong, que se encuentra a 2.150 metros de altitud.
Para tu viaje a la nieve y poder practicar cualquiera de estos deportes de nieve (esquí nórdico, skatting y raquetas de nieve) es necesario adquirir el forfait de la estación de esquí de Tuixent-La Vansa, que está gestionada y regulada por el Ayuntamiento de Josa i Tuixent.
Los servicios de Tuixent-La Vansa
La estación de esquí nórdico de Tuixent no es comparable, en tamaño, con las grandes estaciones de esquí donde se puede esquiar en España. Aún así, cuenta con todos los servicios que podemos esperar de un complejo de deportes invernales. Si te estás iniciando, seguramente no tendrás el material necesario; esto no es un problema aquí, ya que hay un establecimiento con servicio de alquiler de material (desde esquís hasta botas, bastones y raquetas de nieve).
Tampoco deberás preocuparte si te pasa algo, ya que hay servicio de enfermería. Como algo tendrás que comer en tu visita a la estación de Tuixent-La Vansa, debes saber que hay bares y restaurantes en el entorno, como el Refugi Coll de Port, un alojamiento que ofrece desayunos, almuerzos y cenas, con platos propios de la cocina catalana de montaña y con productos locales. ¿Qué sería de un viaje a la nieve sin llenar el estómago con la contundente gastronomía local de montaña?
Los adultos que quieran esquiar con peques, encontrarán su espacio ideal en los circuitos más sencillos (el verde y el azul), que son amplios, tranquilos y con un ambiente familiar; pero si los progenitores quieren esquiar por su cuenta por trazados algo más complicados y dejar a los niños y niñas en buenas manos, también lo podrán hacer gracias al Nòrdic Parc, que es el jardín infantil en el que, además de divertirse, recibirán nociones básicas de iniciación para moverse en la nieve.
La escuela de esquí de Tuixent – La Vansa
En la estación de Tuixent – La Vansa no falta una escuela de esquí, porque no todo el mundo tiene la experiencia necesaria como para lanzarse a explorar los circuitos.
Y siempre vale la pena recibir unas clases de monitores especializados que te darán las claves para avanzar de manera más disfrutona por la nieve, con menos esfuerzo y menos peligro de lesiones.
La escuela de Tuixent ofrece aprendizajes con diferentes modalidades: clases particulares para hasta 4 personas, clases colectivas para hasta 10 personas, grupos de temporada (especialmente indicado para clubs o empresas) y CAMPOS (que son cursos intensivos de fin de semana).
Además, en la escuela de esquí de Tuixent se ofrecen otros servicios que igualmente te pueden ser de mucha utilidad, como asesoramiento de material, en el que te dirán el equipo para la temporada de esquí que debes de llevar (si estás pensando en comprar uno nuevo o renovar el que tienes), información sobre mantenimiento o programas especializados de entrenamiento y para aquellos más novatos que se preguntan; y el ski que es, no os preocupéis hasta los más principiantes están bien acogidos.
Asimismo, hay programas específicos de esquí escolar, para los grupos que viajan a la nieve con el profesorado; además de aprender a esquiar, también descubrirán los secretos de la construcción de iglús, participarán en gincanas o recibirán formación en orientación en la montaña.
¿Cómo llegar a la estación de esquí de Tuixent-La Vansa?
Si te animas a descubrir todo lo que ofrece la estación de esquí de Tuixent-La Vansa, debes saber que se encuentra a medio camino entre las localidades de Josa i Tuixent y La Vansa i Fórnols, ambas en la provincia de Lleida. Está al sur de la sierra del Cadí, de manera que el acceso en coche desde la Seu d’Urgell es el menos recomendable por tener un trazado lleno de curvas. Lo más aconsejable es ir a Tuixent-La Vansa por Solsona y Berga.
Desde Barcelona, hay unos 150 kilómetros en coche, por lo que en menos de dos horas y media os podéis plantar en la estación de esquí de Tuixent-La Vansa. Aunque para los que no quieren moverse mucho, cerca de Barcelona, encontramos la estación de esquí Rasos de Peguera donde se practica mucho el esquí de fondo también.
Los que viajan desde el centro de la Península, como Madrid, tienen 600 kilómetros y unas 6 horas y media en coche, pasando por Zaragoza.
¿Qué hacer cerca de Tuixent – La Vansa?
La estación de esquí nórdico de Tuixent – La Vansa abre en temporada de invierno de 9 a 17 horas, siempre que las condiciones climatológicas lo permitan. Está en un entorno muy montañero, por lo que es un destino perfecto para los que buscan practicar deportes invernales en un paraje bastante virgen.
Eso también implica que esté algo alejado de grandes núcleos de población; el más populoso sería Solsona, que está a unos 40 kilómetros (unos tres cuartos de hora en coche por la carretera sinuosa). Por si eres un amante del esquí de fondo pero te encuentras muy lejos de Tuixent, te recomendamos la estación de esquí en Larra Belagua, es toda una referencia en la práctica del esquí de fondo.
Para los que os preguntáis; qué hacer en una estación de esquí si no esquías, otras opciones para pasar el día en los alrededores es acercarnos al pueblo de Tuixent, a unos 15 minutos en coche desde la estación de esquí, donde podemos visitar el Museo de lasTrementinaires, un curioso oficio tradicional de la zona en el que las mujeres tuvieron un papel esencial.
En La Coma (a 15 kilómetros, unos 20 minutos) y en Sant Vicent de Morunys (a 20 kilómetros, menos de media hora) tenemos un ambiente más animado, con varios bares y restaurantes, así como tiendas y otros servicios. Aunque no esté considerado como uno de los 10 pueblos del Pirineo Catalán con más encanto, Tuixent – La Vansa, puede perfectamente ser uno de ellos, por su espectaculares vistas y grandes cantidades de nieve.